Las líneas de transmisión confinan la energía electromagnética a una región del
espacio limitada por el medio físico que constituye la propia línea, a diferencia de
las ondas que se propagan en el aire, sin otra barrera que los obstáculos que encuentran
en su camino. La línea está formada por conductores eléctricos con una
disposición geométrica determinada que condiciona las características de las ondas
electromagnéticas en ella.
En los sistemas de comunicaciones, las líneas de transmisión encuentran numerosas
aplicaciones no sólo en el transporte de señales entre una fuente y una carga,
sino también como circuitos resonantes, filtros y acopladores de impedancia. Algunas
de las aplicaciones más comunes incluyen el transporte de señales telefónicas,
datos y televisión, así como la conexión entre transmisores y antenas y entre éstas y
receptores.
El análisis de las líneas de transmisión requiere de la solución de las ecuaciones del
campo electromagnético, sujetas a las condiciones de frontera impuestas por la
geometría de la línea y, en general, no puede aplicarse la teoría clásica de circuitos,
ya que ésta se ocupa de circuitos con parámetros concentrados, en tanto que en una
línea los parámetros son distribuidos. Dichos parámetros son: resistencia, inductancia,
capacidad y conductancia y, en los circuitos eléctricos convencionales, están
concentrados en un solo elemento o componente bien localizado físicamente. Se
considera que, en un circuito, los parámetros son concentrados cuando las dimensiones
físicas de sus componentes, incluyendo los hilos de conexión, son mucho
menores que la longitud de onda de la energía manejada por el circuito. Si las dimensiones
del circuito y sus componentes son comparables a la longitud de onda o
menores que ésta, el circuito debe considerarse como de parámetros distribuidos y
su tratamiento requiere de la teoría de líneas de transmisión, derivada de la teoría
del campo electromagnético. Así en una línea de transmisión, la resistencia, inductancia,
capacidad o conductancia no pueden considerarse concentradas en un punto
determinado de la línea, sino distribuidos uniformemente a lo largo de ella.